Las colonias son unos períodos educativas que se organizan para niños o jóvenes. La llegada del buen tiempo en verano, se aprovecha para disfrutar de los entornos privilegiados, cerca del mar, al interior o en la montaña. Esta tradición de más de 140 años ha sido muy importante en los diferentes sistemas educativos, tanto a nivel formal como no formal. Se trabajan aspectos formativos como la convivencia o la relación con el entorno más allá de los espacios cotidianos.
A nivel internacional, las primeras colonias que se conocen tuvieron origen en la ciudad de Zúrich. En el 1876, Walter Bion, médico y pastor protestante, llevó sesenta y ocho niños pobres y desnutridos en la montaña durante un mes. Realizaron actividades muy diversas como por ejemplo excursiones, cantar canciones, juegos… La experiencia resultó todo un éxito y superaron las expectativas y los objetivos que el mismo Bion se había planteado al planificarla. La salud de los niños, objetivo prioritario de la colonia, mejoró notablemente en este corto periodo de tiempo. Pero otros aspectos, que no se habían previsto, como la convivencia y la relación entre los niños (y entre estos y los maestros que los acompañaban) también resultaron positivos. Este éxito de la primera colonia hizo que numerosas entidades y personas impulsaran experiencias parecidas a diferentes ciudades europeas. En España, el primer ejemplo documentado tiene lugar en 1887, cuando 20 niños de Madrid participan en una colonia organizada en San Vicente de la Barquera, Cantabria. Esta experiencia se inspira en las colonias suizas y francesas, y tiene una clara finalidad higiénico-sanitaria: proporcionar unos días de descanso, una alimentación más equilibrada y atención médica básica. Unos años más tarde la iniciativa llega a Cataluña, el 1893, impulsada por la Sociedad Económica Barcelonesa de Amigos del País. Esta entidad, vinculada a los círculos ilustrados y reformistas, organiza la primera colonia infantil fuera de Barcelona, dirigida a niños de familias con pocos recursos. Al 1906, será el Ayuntamiento de Barcelona donde se da un gran impulso, con la creación de la Comisión de Colonias Escolares. El objetivo es doble: mejorar la salud física de los niños a través del contacto con la natura y, a la vez, fomentar valores educativos y cívicos en un ambiente diferente al de la ciudad. Esta experiencia marca el inicio de un movimiento que, con el tiempo, se diversifica y se transforma según las necesidades sociales, ideológicas y pedagógicas de cada momento.
El Museo Hidrolèctric de Capdella1 ha organizado, este verano del 2025, una exposición sobre los cien años de Colonias en la Vall Fosca, Pirineo de Lleida. Esta ofrece naturaleza, patrimonio cultural, buenas instalaciones, aire limpio y vida compartida. Estos elementos convierten el territorio en un lugar privilegiado para el ocio, la salud y el crecimiento de miles de niños y jóvenes catalanes.
Anem de colònies explica el que han sido, durante estos úlitmos cien años, las colonias de verano en la Vall Fosca. La muestra es fruto de diferentes investigaciones realizadas durante unos años. A lo largo de un siglo, las colonias de verano responden a metodologías pedagógicas diversas, a intereses empresariales, a objetivos ideológicos del régimen franquista y, también, al espíritu de dejar un mundo mejor y el compromiso con el país. Cuatro etapas históricas definen el hilo conductor de la exposición, que se asocian a cuatro tipologías de colonias:
- Colonias del Ayuntamiento de Barcelona con el patrocinio de la Sociedad Energía Eléctrica de Cataluña (1917, 1918, 1919 y 1923). Nacen como colonias sanitarias, el higienismo, a la vez que son un espacio de experimentación pedagógica, Escuela Nueva. Participan veinticinco niños cada verano. Cambio de aires: del Rabal de Barcelona al Pirineo, de colonias sanitarias a un laboratorio de pedagogía.
- Colonias de Molinos de la empresa eléctrica Fecsa (1956–1993): Vacaciones organizadas y financiadas por la empresa para los hijos y las hijas de los trabajadores. Un modelo de bono social vinculado al mundo laboral. Participan unos quinientos niños cada verano. Vacaciones pagadas por la empresa.
- Colonias de la OJE (1957-1979): Una herramienta del régimen franquista para formar jóvenes leales al sistema. Disciplina, uniformidad y adoctrinamiento. Participan unos quinientos niños y jóvenes cada verano. Jóvenes adictos al régimen.
- Colonias del Escoltismo: Educación en libertad, actividad arraigada a los valores del escoltismo y al respeto por el medio natural. Hemos escogido una de las diferentes entidades que durante estos años realizan colonias en la Vall Fosca, el agrupamiento Escolta Ramon Folch de Bellpuig d’Urgell. Participan veinticinco niños cada verano. Compromiso con el país y para hacer un mundo mejor de cómo lo hemos encontrado.
Las colonias infantiles evolucionan al ritmo de las corrientes pedagógicas y de los cambios sociales de cada época. A lo largo del siglo XX, reflejan claramente el paso de un modelo educativo tradicional hacia propuestas más innovadoras y transformadoras. A principios del siglo XX, predomina un modelo escolar autoritario, rígido y basado en la memorización, donde el niño asume un papel pasivo, sometido a la disciplina y a la repetición de contenidos. Pero a medida que avanza el siglo, pedagogos como Maria Montessori, OvideDecroly, CélestinFreineto Joan Gelabert —que aplica una pedagogía viva en la Vall Fosca—, impulsan una nueva mirada educativa. Proponen un aprendizaje activo, a partir del juego, la experimentación, el trabajo cooperativo y el contacto con la naturaleza como elementos clave para el desarrollo integral de los niños. Con la llegada del franquismo, este impulso renovador se corta radicalmente. La educación se pone al servicio del régimen, tanto dentro de la escuela como en las actividades de ocio. Las colonias organizadas por la OJE(OrganizaciónJuvenil Española)buscan inculcar valores de obediencia, disciplina, religión y sumisión en la autoridad. El adoctrinamiento sustituye cualquier propuesta pedagógica crítica, y se limita cualquier forma de pensamiento autónomo. A partir de la década de los sesenta, con una sociedad que empieza a abrirse y a cuestionar el modelo dominante, se recuperan las metodologías activas. Educadores y maestros, a menudo vinculados al escoltismo o a movimientos de renovación pedagógica, vuelven a poner en el centro la autonomía, la creatividad, la responsabilidad y el trabajo en equipo. Las colonias vuelven a ser un espacio educativo vivo, con propuestas que se alejan del dogmatismo y apuestan por la experiencia como herramienta de aprendizaje. La coeducación, la gestión emocional, la inclusión, el respecto a la diversidad y la sostenibilidad son parte esencial del proyecto pedagógico. Las colonias continúan activas y arraigadas, ofreciendo a los niños y jóvenes una experiencia educativa significativa, adaptada a los retos y valores del mundo actual.
Anem de Colònies tiene treinta y un plafones con fotografías, textos y enlaces QR. También hay numerosos objetos que diferentes personas e instituciones han prestado, y que son unos elementos claves para entender las cuatro etapas de las Colonias. Esta visión histórica nos aporta diferentes elementos pedagógicos para valorar la importancia de la educación no formal para el crecimiento físico, intelectual y ético de los niños y jóvenes que participan. A la vez la exposición nos aporta el conocimiento histórico de dos modelos de sociedad muy diferentes. Un primero de Totalitarista basado en los privelegisde unos pocos, y que han vuelto en fuerza en las instituciones públicas de diferentes países del mundo occidental. Y un segundo basado en Derechos y Deberes de las personas, por la defensa de la igualdad de todas las personas que convivimos en un mismo lugar y por el respeto y lel cuidado del Medio Ambiente. El conocimiento del pasado nos lleva a la construcción del presente y la proyección del futuro. Y tal como dice el escritor Elias Canetti:Si cada época perdiera el contacto con las anteriores, si cada siglo cortara el cordón umbilical, solo podríamos construir una fábula sin futuro. Sería la asfixia.
1 Horarios Museo: https://museuhidroelectricdecapdella.cat/es/ La exposición finaliza el día 12 de octubre de 2025 a la Central de Capdella. A partir de esta fecha está a disposición de cualquier entidad o institución que quiera organizarla.