Afortunadamente ya van apareciendo materiales destinados a la Educación para la Educación Ambiental y para la Sostenibilidad que tienen como destino las escuelas e institutos. La que ha elaborado FUHEM es una referencia necesaria para modular las acciones de aprendizaje del alumnado. No nos extendemos más aquí porque ya la comentamos en otra entrada de Ecoescuela abierta. Es complementaria de la que ahora presentamos.
También hay que saludar la aportación que supone para la formación de los másteres la Guía EAS al aula. Ha sido elaborada por un equipo de especialistas -algunos son profesores en activo en la enseñanza obligatoria y en el ámbito universitario- a iniciativa del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico, en este caso coordinados por el Ceneam (Centro Nacional de Educación Ambiental). Ha colaborado el Ministerio de Educación y Formación Profesional.
Más exactamente el material que se presenta supone la elaboración de una “Guía para la introducción de un módulo de educación ambiental para la sostenibilidad en el máster universitario en formación del profesorado de educación secundaria obligatoria, bachillerato y formación profesional”. Es decir, mantiene que en los Másteres de Formación del Profesorado debe dedicarse un tiempo a considerar que vivimos en un mundo diferente, que la aproximación a las problemáticas ecosociales tiene un papel preferente, que desde cualquier grado universitario, y especialmente en los que se imparten en las Facultades de Educación, hay que atender. Justifica que es imprescindible en los másteres que intentan la capacitación del profesorado. Buena parte de alumnado que lo curso estará diseñando dentro de unos años estrategias de aprendizaje/enseñanza en las aulas de España. A su vez, permite ampliar los intentos actuales en formación con estas premisas en varias universidades; y anima a aquellas que todavía no la han introducido con las nuevas variables que los tiempos exigen. Ejemplifica un posible camino de aproximación y da pautas para otros itinerarios formativos.
Tiene la gran ventaja de que es de acceso libre en el enlace antes aludido. Pero además será sumamente útil para todo el profesorado de la enseñanza obligatoria. Ayuda a concretar algunas cuestiones de las que se habla en los desarrollos curriculares de la Lomloe. Vamos a intentar resumir en qué consiste, simplemente recogiendo algunas ideas fuerza que propone.
En primer lugar se plantea una serie de cuestiones que pueden justificar el encuentro del alumnado con la sostenibilidad cercana o global. Digamos que apuesta por hacerlo desde un punto de vista ecosocial. No solamente porque así se defiende en el PAEAS (Plan de Acción de Educación Ambiental para la Sostenibilidad). También elaborado previamente por un conjunto más amplio de especialistas. Este documento se difundió ampliamente entre las CC.AA., que son quienes deben concretar sus planes. Desde la Lomloe se hace especial hincapié en que hay que revisar el punto de partida del alumnado en estas cuestiones y diseñar situaciones de aprendizaje que le permitan comprender la complejidad de la vida cotidiana. Digamos que el mundo exterior entra en las aulas para que desde allí se puedan generar actitudes y compromisos. Si así sucede se ayudará a componer un mundo con más interés y capacidad de acción ante las situaciones problemáticas que se nos plantean, que el alumnado ve a su alrededor. Además, digamos que era imprescindible ofrecer al profesorado y al alumnado posibilidades de comprensión de situaciones que le afectan directamente, que incluso son portada a veces en los medios de comunicación. Sucesos, corrientes de opinión, o apelaciones a la acción personal que sucede en su contexto, donde a veces la sociedad permanece despistada ante estas problemáticas colectivas.
En un segundo bloque, presenta orientaciones para el desarrollo de situaciones de aprendizaje, algo imprescindible en la formación del profesorado. Las ejemplifica en la ciudad, el escenario donde interaccionan valores sociales con compromisos individuales, entradas y salidas de materiales de energía, distintos modos de movilidad. En síntesis, la vida compartida en la ciudad es el escenario para poner en valor y a la vez cuestionar el grado de consecución de algo tan importante como los ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible). No debemos olvidar esta encomienda global y de la UE, especificada esta en el llamado Pacto Verde Europeo y en su dimensión educativa en el proyecto Greencomp.
Termina el bloque con una cuidada y amplísima selección de recursos para trabajar en las aulas todos los contenidos que tienen relación con los ODS. En pocas ocasiones hemos encontrado la diversidad, amplitud y complementariedad de propuestas de aula y recursos afines sobre una temática determinada. Se amplía y complementa en el Anexo 2 de la Guía.
Un tercer bloque presenta ejemplos de programas que ya se desarrollan actualmente en las aulas de España, que habría que conocer en los másteres de formación. Son solo dos ejemplos de proyectos colectivos que tienen una probada transformación educadora. Lo organizan en torno a problemáticas o incógnitas de la interacción entre la sociedad y el medioambiente, entendido este en su sentido conceptual más amplio.
La evaluación es una condición básica que hay que prever cuando se está elaborando un proyecto. De ahí que en el Anexo 1 se incluya una propuesta de criterios genéricos de revisión de situaciones de aprendizaje y otros materiales didácticos.
Desde aquí, animamos a que durante el presente curso se experimente una parte de la propuesta, se validen las acciones que se presentan. Pero sobre todo, que se dialogue en los centros para concretar para el curso 2025-2026 situaciones de aprendizaje que sean la estructura educativa del centro concreto, que queden expuestas con claridad en los proyectos educativos, que entren de forma no forzada en las programaciones de aula y materia. Si así sucede, se provocará el desarrollo de capacidades tanto en el profesorado en formación inicial en el máster como aquel que ya está dando clase; tan necesitado como está del diálogo constante entre teoría y práctica.
Sin duda, el alumnado de los másteres nos lo agradecerá; verá el entorno ecosocial de otra forma, quizás retomando lo que postulaba Edgar Morin en sus siete saberes. Posiblemente, cuando acceda a la vida profesional educadora plantee en sus clases una revisión de nuestra relación con el mundo ecosocial del que formamos parte.