“Los seres humanos estamos concebidos para el aprendizaje permanente hasta el final de nuestras vidas, desarrollando siempre la curiosidad y el ansia por saber más”.
No queremos que estas líneas sean algo tedioso y aburrido, lleno de datos estadísticos y de resultados. Más bien, nuestro objetivo es transmitiros las sensaciones con las que hemos cerrado el tercer encuentro presencial de este grupo de soñadores que creemos, como muchos de vosotros, que la educación en general, pero la educación de adultos en particular, va más allá de un currículum y un espacio físico. Nuestros alumnos aprenden enseñando, y ese es el gran logro de #partimonioCEPA.
Cuando decidimos a embarcarnos en este proyecto, no éramos conscientes de las dimensiones pedagógicas y humanas que iba a tomar. Del 22 al 25 de octubre de 2024 tuvimos el tercer encuentro de nuestra agrupación en San Lorenzo de El Escorial, y en el acto de clausura, Guadalupe Ramírez Ruiz, consejera Técnica de la Subdirección General de Cooperación Territorial e Innovación Educativa, nos recordó que estas agrupaciones van de crear redes, y eso es precisamente lo que estamos haciendo. Crear una red entre el alumnado de nuestros centros, crear vínculos entre ellos, apoyos y colaboraciones que les hacen creer intelectualmente, pero también como personas. Redes que permiten plasmar el conocimiento de un pueblo, su patrimonio, para difundirlo a los demás, para transmitirlo a quienes vienen detrás, para que nuestras tradiciones no se pierdan. Pero también, redes entre los cuatro centros que conformamos esta agrupación: CEPA Avilés, CEPA Pedro Martínez Gavito, CEPA San Bartolomé de Tirajana y CEPA Yecla, porque el trabajo en común es continuo, también la colaboración en la investigación científica que va asociada a este proyecto, los planes de futuro, pero sobre todo los vínculos personales creados.
Estos días de convivencia y aprendizaje en San Lorenzo de El Escorial hemos podido comprobar lo bien que va evolucionando nuestro proyecto. Hemos descubierto la necrópolis de Arteara, la cultura del gofio, el léxico canario, la figura de Pancho Guerra o el silbo canario con la demostración que nos hizo nuestra compañera Mónica. Pedro nos presentó los trabajos realizados, muchos y diversos, en Avilés: en naturaleza, con el cañón de Avilés y la ruta L’Escañoriu; en arquitectura, con los lavaderos o el centro Niemeyer; en arte, con Carreño Miranda,…. Desde Yecla, Jose nos habló de las emociones que ha despertado en los alumnos el Monte Arabí, y cómo se difundió esto entre los escolares de primaria, de las leyendas yeclanas, de la literatura de Azorín y de la vendimia y elaboración del vino.
Y aunque Javi nos contó todo lo hecho en San Lorenzo de El Escorial y su entorno, lo pudimos ver en primera persona, pudimos visitar el Arboreto Luis Ceballos junto con el bosque Gavito, donde plantamos un árbol cada CEPA y liberamos un búho real. Pudimos conocer de primera mano el proceso de elaboración de las bizcotelas de San Lorenzo de El Escorial, pero también conocimos la “tierra de dragones” en Robledo de Chavela o las fiestas de la Vaquilla en Fresnedillas de la Oliva, unido a la romería y la indumentaria de El Escorial.
Todo esto se trabaja en las aulas de nuestros centros educativos de manera colaborativa, interactuando los distintos grupos de las enseñanzas que tenemos, porque si unos alumnos tienen el conocimiento ancestral y lo transmiten a sus compañeros, otros lo plasman en documentos gráficos, visuales, auditivos, etc. Los centros en su totalidad se ven embargados de este sentimiento que es #patrimonioCEPA.
¿Esto queda aquí? Pues no, va más allá, tenemos por delante todo este curso para seguir investigando, recogiendo información e ideando formas de transmitirla que aúne tradición e innovación. Pero lo que es realmente importante es que esta forma de trabajo se está impregnando en nuestros claustros, que los compañeros ya piensan desde el primer día de curso en cómo van a integrar en sus clases esta forma de trabajo, qué van a trabajar en los próximos trimestres y cómo van a colaborar entre ellos, e incluso entre las distintas enseñanzas, para obtener unos resultados finales sorprendentes.
Tenemos aún pendientes de realizar dos movilidades. En ellas seguiremos creando redes no solo entre nosotros, sino también con otros centros que nos van a acoger para conocer de primera mano esta metodología que estamos desarrollando. Cuando esta agrupación llegue a su fin, al menos en los papeles, pues estamos convencidos de que seguiremos trabajando juntos más allá de una subvención, os contaremos cómo nos sentimos y qué conclusiones científicas hemos obtenido. Será a final de este curso cuando esto lo plasmaremos en papel, pero ya os podemos adelantar que los resultados van a ser muy buenos, pues ya lo estamos viendo en el día a día de nuestras aulas y en la motivación y alegría de nuestros alumnos.
Volveremos con una última entrega de #patrimonioCEPA, hasta entonces os animamos a descubrir vuestro pueblo y compartirlo.