Volverán o ya han vuelto a clase niñas, niños y adolescentes de la zona de Valencia y de otros lugares del Mediterráneo, conocedores, testigos o protagonistas de infinidad de situaciones dramáticas que el efecto destructor de la pasada Dana ha tenido sobre vidas, familias, amistades, viviendas y territorios.
Los centros educativos y el profesorado pueden ser agentes muy activos en la restauración del alumnado y las familias, contribuyendo, desde un exquisito cuidado, al mejor desarrollo personal del alumnado y a la par al desarrollo cívico del entorno, propiciando procesos formativos y sanadores de reconstrucción individual y colectiva. Para ello hay que plantearse la mejor forma de hacerlo, tomar conciencia de las potencialidades, desde las necesidades reales.
El profesorado puede ayudar a canalizar tantas y tan importantes vivencias, puede ser un apoyo muy valioso afrontando junto al alumnado situaciones tan singulares. A la vez puede enseñar a desarrollar esperanza, y desde luego aprender, enseñando a analizar y a estudiar alternativas de reconstrucción positivas,
Con estas reflexiones como docentes, quisiéramos contribuir a transformar esta situación sobrevenida, tan adversa, en potenciales vivencias escolares positivas, que enseñen, aprendiendo a aprender, a salir de lo vivido de la mejor de las maneras posibles.
Proponemos tres líneas o momentos de trabajo sobre los que reflexionar para programar la intervención consciente:
- Linea 1.- Acompañamiento, expresión y desahogo, afecto, seguridad, reconocimiento, comunicación.
- Linea 2.- Mejorar lo que sabemos. Cómo, de quién y de qué podemos aprender, debemos Informarnos.
- Linea 3.- Abrir espacio a la acción y con ello a la esperanza. Acuerdos y propuestas concretas de actuación, compromiso social.
El objetivo es promover planteamientos docentes que busquen cómo afrontar lo vivido, de forma positiva y proactiva, tanto a nivel personal como colectivamente, contribuyendo a propiciar soluciones, buscando la mejor gestión de la reconstrucción y salir reforzadas y reforzados, favoreciendo la resiliencia personal en las crisis, y exigiendo la mejor reconstrucción posible del entorno.
Linea 1.- Acompañamiento, expresión y desahogo, .afecto, seguridad, reconocimiento, comunicación
La escuela, el instituto disponen de espacio, tiempo y personas que educan por eso pueden cuidar la creación de situaciones de confianza y espacios de diálogo que vinculen lo que ocurre dentro y fuera de los centros, que integren lo que ocurre dentro y fuera de cada persona.
La planificación escolar ha de crear oportunidades para canalizar y expresar lo vivido, para dar salida a tantos y tan diversos sentimientos individuales, únicos y todos ellos válidos, todos son lícitos, son los suyos (miedo, pavor, inseguridad, culpa, dolor, impotencia, cobardía, valentía, impotencia…) nada es mejor ni es peor, debemos actuar sin juzgar, acompañando, legitimando lo que sintieron…. Conversar, o no, sobre ello, compartir, o no, lo vivido, posibilitar escuchar y escucharse, sentir que estamos aquí ahora, que nos reconocemos, que nos tenemos. Es un primer momento imprescindible.
Se han de ofrecer diversidad de propuestas desencadenantes de momentos comunicativos, empáticos, variadas formas de expresión, sin forzar a ello en ningún caso. Mediante propuestas de comunicación diversas, pues diversos somos los seres humanos, cada cual ha de encontrar la forma idónea de comunicación, y su momento. Por eso hemos de propiciar que elaboren su propio relato de lo vivido, proponer actividades de expresión oral o escrita, pueden ser círculos de diálogo, asambleas, debates, tertulias…, a través de cuentos, poesía, cartas, frases publicitarias o creación de textos íntimos o quizá desde propuestas artísticas de música, expresión corporal o danza, desde movimiento artístico o deportivo, mediante el dibujo, pintura, propuestas creativas que incluyen las digitales, crear, cortos, guiones, imágenes… desde el uso de cámaras o aplicaciones, en este caso para adolescentes…
Se trata, en definitiva, de buscar la canalización de sentimientos, que no se les enquisten dentro, que se expresen; fomentar, sin forzar, procesos creativos para desahogarse, expresar, comunicarse, comprenderse y desde luego sentir comprensión; eso sí, que ocurra, cuando ocurra, a su propio ritmo, en su momento. Por eso, además de cuidadoras propuestas puntuales del primer día, han de mantenerse en el tiempo propuestas cotidianas, sin necesidad de aludir siquiera al tema de la DANA, salvo si en un momento se ve conveniente pues el grupo, o alguien, lo necesita. Lo traumático ya lo tienen dentro, se trata de crear oportunidades para sacarlo, si lo necesitan.
Podemos considerar algunas sugerencias más enfocadas a superar el trauma a dar salida y dar un paso más a ir reelaborando junto al propio recuerdo, el relato colectivo, trabajando formas diversas que focalicen la mirada en aspectos diferentes, múltiples.
- Selección de un momento especialmente importante/duro para cada cual. Contarlo. Dramatizarlo en grupo. Comentarlo. Qué pasó, qué sentí, qué hice. Tras verlo representado: Qué he visto. Qué he sentido. De qué me he dado cuenta.
- Buscar casos dignos de elogio, casos que consideren ejemplo o referente positivo y que los compartan, dibujen, expresen…Comentarlo después, si procede: Qué pasó, qué sentí, De qué me he dado cuenta… qué me llama la atención de lo escuchado, qué he aprendido.
- Podemos incorporar el humor como elemento importante para la salud mental, proponerles buscar y encontrar en sus memorias, algún momento divertido dentro de toda la tragedia. Encontrar lo cómico y poder reír con otras personas, compartir sonrisas o risas, facilitan legitimar lo que vivieron y elaborar relato común paralelo y que puede aligerar el trauma.
Linea 2.- Ampliar lo que sabemos. De dónde , de qué y de quien podemos aprender e Informarnos
Es de gran utilidad ampliar lo que ya sabemos, investigar, estudiar, informarnos bien, buscar documentación sobre posibles intervenciones en crisis, en catástrofes… Escuchar y leer para aprender de lo que ya otras personas han estudiado, investigado o vivido.
Ampliar nuestra propia percepción y la del alumnado y sus familias; es importante la vivencia subjetiva de lo ocurrido pero no deja de ser limitada, parcial, y es importante tomar perspectiva y muy importante aprender de ello
Alimentemos la formación individual y demos cancha a la inteligencia colectiva.
* A modo de ejemplo podemos conocer la propuesta del Consejo Nacional para la Reducción y Gestión del Riesgo de Desastres (NDRRMP) que habla de cuatro áreas temáticas
- La prevención y mitigación de desastres
- La preparación para desastres
- Dar respuesta a desastres y
- La Rehabilitación y recuperación de desastres.
Estos cuatro ámbitos de trabajo, pueden analizarse críticamente, comentando lo más relevante para la realidad personal o local y pueden servir para organizar la tarea de ¿qué podemos hacer ahora? con ideas y soluciones organizadas para cada uno de las cuatro áreas temáticas
* Otra fuente de información es conocer lasestrategias que Naciones Unidas lleva trabajando para un Mundo más Seguro desde 1994, considera la reducción del riesgo de desastres (RRD) comoalgoindisociable del desarrollo social y económico. Para construir “El Futuro que queremos” se propone el reto de la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible. https://sdgs.un.org/es/goals.
* Desde recortes de prensa, periódicos, noticias en redes o informativos, ver , investigar, analizar, y contrastar informaciones, Que aprendan a detectar y analizar las fakes que confunden, alarman y dificultan la intervención o la ayuda, antes de difundirlas. Puede comentarse en clase todo, analizar, opinar sobre ello, debatir y siempre fundamentar, especialmente cuando haya dudas o polémica, ampliar la información… Podemos trabajar desde rutinas de aprender a pensar: “veo, me informo y aprendo”: “Antes pensaba… , Ahora pienso…”.
* Probablemente se haga necesario, desde luego muy conveniente, abordar el desarrollo moral de nuestra sociedad, así como la asunción individual de códigos éticos, ir más allá del cumplimiento de lo que la normativa considera legal, quizá sea un momento idóneo para promover el desarrollo de la ética del cuidado, y promover que sean la vulnerabilidad, la interdependencia junto al desarrollo sostenible y el cuidado medioambiental, lo que incida en propuestas cuidadoras y en generar compromisos éticos personales y comunitarios, promover que la ciudadanía lo valore y lo exija a sus conciudadanos y autoridades.
Linea 3.- Abrir espacio a la acción y con ello a la esperanza. Acuerdo de propuestas concretas, de Compromiso social
Es importante, en esta tarea restaurativa que proponemos, generar actividades encaminadas a reflexionar sobre qué y cómo harían para reconstruir los daños. Les llevará a pensar individual e interconexionadamente de forma proactiva, vislumbrar salidas, y si hay salida, se despierta la esperanza.
¿Qué tal implicar a niñas niñas, adolescentes, profesorado y familias en reflexionar y generar ideas y acciones pacíficas sobre cómo reconstruir los daños mejorando nuestra ciudad, nuestra, calle, nuestro pueblo.
Cada grupo escolar, cada persona, cada colectivo, bien puede asumir su parte activa en la reconstrucción, bien desde acciones directas en el territorio o desde propuestas a entidades responsables, desde iniciativas para promover cambios sociales, tan necesarios y convenientes, para nuestro futuro pacífico y sostenible. Es buen momento para que en cada grupo escolar se generen alternativas esperanzadoras y propuestas que incidan socialmente en la mejora colectiva.
Pensar y aportar soluciones espontáneas, hacer sentir que todas las ideas sean importantes y tenidas en cuenta.
Se trata de configurar un enorme abanico de posibilidades a estudiar… desde deseos a propuestas concretas, realistas, que se han de trabajar, que se pueden agrupar, revisar, priorizar… nunca desechar pues cada persona lo propone por alguna razón. Cada idea cuenta y, si es polémica, si no hay acuerdo, es buena ocasión para aprender a trabajar ante el conflicto de intereses, una oportunidad de mantenerla o cambiarla.. y si es para una acción colectiva, ajustándola hasta consensuarla.
Se pueden elaborar unos listados “iniciales” y retomarlos después de Informarnos para ampliar lo que sabemos.
Con los listados de soluciones se propone agrupar ideas aportadas en “círculos de influencia”, es decir, ordenarlas según a quien corresponden esas soluciones y viendo cuales están en sus propias manos, cuales en manos de la comunidad, de la familia, del cole o instituto, del ayuntamiento etc…y hacerlas llegar a cada grupo destinatario como propuestas de acción.
Nos parece muy oportuno y sanador difundir planteamientos que no cabrean, que buscan encontrar el bien común, valorar las soluciones de reconstrucción que atiendan necesidades, anticipen riesgos y que ofrezcan alternativas posibles, saludables y sostenibles..
Quizá sea el momento de exigir, prohibir o Renunciar a cobros por comisiones» legales’ pero tremendamente inmorales, de rechazo y denuncia a «prácticas buitre» que aprovechan las desgracias para enriquecerse, rechazar a quienes acepten comisiones o mordidas que aunque sean legales, son éticamente impresentables.
También y siempre ajustado a las diferentes edades del alumnado, nunca agobiarles aún más, sino abordarlo como alternativas de CUIdadanía, denunciar la avaricia que propicia la especulación urbanística y que siempre prime el cuidado, el bien común en la toma de decisiones.
Una propuesta común: proponemos elaborar, redactar y adherirse públicamente a un compromiso ético de ciudadanía a modo del Juramento Hipocrático. Se trata de redactar en común el texto del JURAMENTO ÉTICO que llevaría a un compromiso ético,un documento que firmen personas y/o empresas vinculadas con la reconstrucción, comprometiéndose a que cada euro destinado a las zonas damnificadas vaya al objetivo directamente, sin mordidas, comisiones ni desvíos.
Podemos hacer públicos estos listados para el reconocimiento de quienes lo firman y que supongan un elemento de calidad ciudadana, propiciando que se valore, reconozca y honre a quienes lo asumen.