Pasar de algo más de 200.000 estudiantes que se están beneficiando de las becas y ayudas para la primera matrícula a un millón es la pretensión del PSOEcon la PNL que ha presentado hoy en el Congreso.
El objetivo es forzar la negociación con el gobierno, así como con las comunidades autónomas -que en realidad son las que financian la universidad- para que se pase de una inversión de unos 300 millones anuales a becas de exención de matrícula a unos 1.000 millones, a razón de unos 180 o 200 de incremento anual en los próximos cuatro años.
Dado el carácter plurianual de la medida, desde las filas socialistas pretenden comenzar con el alumnado que tenga mayores dificultades económicas. De manera que el primer paso sería presentar la declaración de la renta, y quienes tengan menores ingresos serían los primeros beneficiaros. En los años siguientes se iría ampliando el umbral de renta hasta la totalidad del alumnado.
La máxima responsable de educación en el PSOE, Luz Martínez Seijo asegura que el partido quiere revertir el «tasazo» de hace algunos años que ha traído una gran diferenciación entre las comunidades autónomas, de hasta un 60% en los precios de primera matrícula entre unas y otras. Una situación que ha dejado a España como el 8º país con las tasas de matrícula más altas de la Unión y como el 6º por la cola en inversión en Univeridad.
Con el plan del partido socialista sería posible que una joven, un joven, pudiera estudiar un grado completo gratuitamente si aprueba todas las asignaturas en la primera matrícula. Quieren incentivar el esfuerzo garantizando esta gratuidad de la primera matrícula como acicate frente a los precios, muy superiores, de las segundas y terceras matrículas.
El PSOE ha establecido esta cifra haciendo una media del precio del crédito universitario y estableciéndolo en 16€ por cada crédito.
La propuesta guarda relación con el modelo andaluz aunque funciona de forma algo diferente. Mientras en Andalucía el alumnado se matricula y según vaya aprobando se le bonifica en las siguientes matrículas, en el modelo que se plantea ahora, la bonoficiación se obtiene desde el primer momento.
El partido socialista considera que su planteamiento es razonable en lo económico, aunque claro está, habría que negociar con las comunidades autónomas dentro del Consejo General de Política Universitaria.
Esta medida de ampliación de las becas y ayudas, aseguran desde el PSOE, tendría que ir englobada dentro de una revisión de la política de financiación de las universidades, algo que tendrá que estudiarse, además, dentro de las discusiones de al subcomisión del Pacto en el Congreso de los Diputados.
«Intentamos garantizar los recursos económicos para todos», comentaba Martínez Seijo a la prensa. De manera que haya menos o ninguna diferencia entre autonomías en los precios de matrícula. Y al mismo tiempo que se amplíe la financiación de las universidades para que haya una mayor convergencia de España (con una inversión del 1,08% del PIB en universidad) con la UE (1,27%) y la OCDE (1,37%).
Desde el PSOE, además, no se descarta buscar la manera de llevar este debate a las comunidades autónomas. La PNL solo podría afectar al Ministerio de Eduación que, a parte de la politica de becas y ayudas, no tiene más competencia sobre las universidades. Si la iniciativa pasa por homogeneizar la situación entre las diferentes autonomías, sería necesario que se realizaran acciones similares en los diferentes territorios.