La proliferación de casas de apuestas, así como de las apuestas online y la publicidad asociada y del patrocinio de equipos o eventos deportivos es preocupante, sobre todo en los últimos años.
Este crecimiento, unido a la relación de los jóvenes con este mercado, hizo saltar la chispa de Mercedes Escavy, profesora de Inglés en el IES José Planes, del barrio de Espinardo (Murcia).
“Llevo 3 o 4 años viendo cómo muchos negocios han cerrado para convertirse en locales de juego”. Esto le hace plantearse qué está pasando y poner sobre la mesa un proyecto de innovación en el que sea su alumnado el protagonista e investigue lo que está ocurriendo.
La Región de Murcia tiene el récord estatal de establecimientos dedicados al juego, incluso superior a Madrid, con 370. Estos son solo los locales en la calle. Según los datos que han recabado los alumnos, también existen 1.283 terminales de apuestas (máquinas desde las que apostar), a lo que sumar el juego online o los bingos y casinos.
Los alumnos de Mercedes, de 4º de la ESO, de 2º de Bachillerato y algunos de un ciclo de grado medio, son quienes han realizado un estudio sobre la ludopatía, la proliferación de locales y su ubicación en la ciudad, así como de la normativa que los rige en la Comunidad. “La legislación es difícil de encontrar y analizar”, asegura esta profesora. “No he encontrado ninguna norma sobre la distancia con los centros educativos, aunque sí con respecto uno de otros”. Como en otras autonomías, aunque suele haber una indicación de la distancia mínima entre unos locales y otros, nada se dice sobre los metros que deben guardar con respecto a los centros educativos.
Además, chicas y chicos hicieron una encuesta entre sus compañeros del instituto para saber, aunque fuera de forma testimonial, cuál era su relación con el juego. Los datos no son halagüeños. Un 35% de quienes respondieron a la encuesta (264 jóvenes) admitieron haber visitado casas de apuestas. Asegura Mercedes a este diario que, además, las organizaciones que trabajan con personas adictas al juego cada vez reciben a gente más joven, entre ellos, menores de edad.
A la pregunta de ¿Con qué frecuencia has visitado un casino o una casa de apuestas? una inmensa mayoría, 62,6%, asegura no haber puesto el pie en ninguno de estos locales. Y un 30% dice hacerlo con poca frecuencia. Eso sí, un 8% lo hace con frecuencia o mucha frecuencia.
Preguntados por los motivos para jugar, la mayor parte tiene claro que ganar dinero es el principal, seguido de la facilidad de hacerlo, por influencia de las amistades y, en último lugar, por problemas familiares.
Los alumnos de Mercedes Escavy también han preguntado a sus compañeros de instituto si creen que jugar puede suponer problemas de adicción. La gran mayoría, algo más del 69% declara que sí, un 16% dice no haber jugado y no saberlo. Un 9,2% afirma que puede controlarlo y un preocupante 5% dice que no considera que jugar con frecuencia pueda provocar adicción.
Las normativas autonómicas establecen la prohibición de entrada a estos locales a menores y, en la mayoría de los casos, indican que son estos establecimientos los que deben controlar, en la puerta, su acceso. Un paseo por cualquier local demuestra que esta figura no existe.
La Federación de Enseñanza de CCOO en la Región de Murcia ha apoyado la difusión de este estudio en una rueda de prensa en la que ha participado Mercedes Escavy. Desde el sindicato denuncian la situación y exigen al gobierno autonómico que tome cartas en el asunto, asegurando que los locales de apuestas trabajen para que los menores no puedan acceder a ellos. También exige al Ejecutivo que elimine las exenciones fiscales de las que se beneficia el sector del juego.
Según el sindicato, un acuerdo del Consejo de Gobierno murciano de inicio de curso elevaba la distancia mínima con respecto a los centros educativos de 200 a 500 metros, al tiempo que la distancia entre locales pasa de 500 metros a un kilómetro. Pero, según las mismas fuentes este acuerdo no ha visto su reflejo en el Boletín Oficial de la Región de Murcia.
En el estudio que han realizado en el IES José Planes, además, han hecho una búsqueda en Google Maps para demostrar la cercanía de algunas de estas casas e apuestas con respecto a los institutos de la zona.
«Los chicos lo han visto de forma clara; se asustan (con los propios resultados de su trabajo). Se han concienciado», asegura su profesora. Esto justifica la difusión que le quieren dar al estudio, que ya han empezado en algunos medios de comunicación y en charlas en otros institutos. También con un manifiesto.
«No hay nada que beneficie a un joven en el hecho de ir a un salón de apuestas. Es perverso. Se trata de locales que no tienen ventanas al exterior, en los que no hay relojes», afirma Escavy, quien asegura que «hasta los 20 años no existe una formación completa en relación al control de impulsos y voluntades».
Escavy también denuncia que hay muchos intereses tanto políticos como económicos para que la situación continúe como está, así como un intento por «blanquear» esta situación por parte de la Administración del Estado. De hecho, solo la Región de Murcia ingresa vía impuestos decenas de millones de euros del juego.
Proliferación
Sirva un botón como muestra. Si se entra en la página web en la que la empresa Codere muestra dónde tiene sus locales, la vista es preocupante. Mientras en lugares como Murcia, Galicia, Madrid, País Vasco o la Comunidad Valenciana hay grandes masas de estos locales, en otras zonas es prácticamente inexistente. Caso, este último, de Cataluña, en donde prácticamente no hay ninguno.
Los datos que recoge la Dirección General de Ordenación del Juego, perteneciente al Ministerio de Hacienda, se refieren a edades por encima de los 18 años, pero las organizaciones que luchan contra el juego y la ludopatía aseguran que los jugadores habituales comienzan antes de la mayoría de edad. Las cifras tanto de personas que juegan como de las cantidades que apuestan (y pierden) son preocupantes.
Otro de los aspectos que denuncia Mercedes Escavy es la relación que este tipo de negocios ha establecido con los jóvenes mediante la publicidad y el patrocinio de equipos deportivos, así como la gran cantidad de publicidad en todo tipo de medios protagonizada, en algunos casos, por personalidades importantes del mundo del deporte, como pueden ser Rafael Nadal, Cristiano Ronaldo, Vicente del Bosque… «Mezcla perversa el deporte con el juego», sentencia Escavy. Según sus datos, 19 equipos de la liga profesional de fútbol reciben el patrocinio de alguna de las empresas de apuestas. Tan solo la Real Sociedad se libra, puesto que fueron sus socios quienes decidieron que no querían estos patrocinios.
El de la publicidad es un asunto que, por ejemplo, Madrid acaba de legislar, pero solo para los medios de comunicación públicos, es decir TeleMadrid y OndaMadrid, tras la aprobación de la proposición de Ley presentada por Unidos Podemos.
El Ministerio de Hacienda lleva trabajando desde 2015 en la elaboración de un decreto que regule la publicidad de las apuestas online. Después de cuatro años, ninguno de los dos ejecutivos que ha ocupado La Moncloa en este tiempo ha sido capaz de sacarlo adelante, a pesar de que a primeros de febrero la ministra asegurara que tenían un texto bastante avanzado.