Desafiar a nuestro alumnado para que le pique la curiosidad, se sienta retado y se le remuevan sentimientos y emociones; y que todo lo anterior le suceda integrando de manera profunda cuestiones curriculares y saberes básicos puede parecernos una tarea ardua.
Si, además, queremos darle un enfoque ecosocial con una base curricular a nuestra práctica docente, asegurar un aprendizaje significativo y que se puede evaluar competencialmente y, en la medida de lo posible, de un modo formativo (ah, y que no se nos olvide, integrándolo todo, por supuesto, en nuestra programación de aula anual); entonces es probable que decidamos dedicarnos a otra cosa. Soy docente, no puedo cuadrar un círculo (o tal vez sí).
Bromas aparte, las situaciones de aprendizaje que plantea la LOMLOE como eje central de su propuesta de estructura curricular, lejos de ser un “nuevo palabro” o una forma distinta de nombrar lo mismo de siempre, pueden ser una herramienta muy útil para avanzar en lo que, de primeras, podría parecernos cuadrar un círculo.
Desde FUHEM, conscientes de esta dificultad a la hora de programar y elaborar materiales propios, decidimos facilitar un método de diseño de situaciones de aprendizaje del que hablamos en un artículo anterior para ahondar en las posibilidades de este nuevo reto metodológico. Tiempo después, dando una vuelta de tuerca, nos hemos lanzado a realizar el desarrollo completo de tres situaciones de aprendizaje, ideadas, respectivamente, para las asignaturas de Biología, Historia y Atención educativa, Tecnología y Valores, para el curso de cuarto de ESO.
La evolución
En La evolución, una abeja entra por la ventana y Lucía se dispone a matarla con insecticida. Entonces, Alba la para en seco y la increpa: “¿Qué haces? ¿No ves que estás matando tu desayuno?”.
Esta situación cotidiana nos proporciona el primer gancho para fijarnos en estos insectos, plantearnos qué nos pasaría individual y colectivamente si desapareciesen e ir abordando, a partir de los conocimientos y las percepciones de nuestro alumnado, el tema de la evolución, poniendo el foco en la biodiversidad como consecuencia de esta y como principal mecanismo de seguridad ecosistémica. De este modo, el alumnado puede ir entendiendo que la evolución es fruto de la cooperación entre especies y que, por eso, la supervivencia de cada una de ellas es necesaria para la supervivencia del resto de seres vivos.
Desarrollamos los contenidos curriculares proponiendo y trabajando en común estas cuestiones: ¿cómo han evolucionado las abejas? ¿qué papel desempeñan la competencia y la cooperación en este proceso?, ¿por qué es tan importante la coevolución?, ¿por qué la vida tiende a incrementar la biodiversidad con el paso del tiempo?, ¿qué implicaciones tiene la actual pérdida masiva de biodiversidad?, ¿cuáles son las causas de la disminución de las abejas?, ¿dependemos de las abejas para nuestra subsistencia?, ¿cómo podemos abordar esta extinción de especies?
El proyecto final de esta situación de aprendizaje, de carácter competencial, moviliza al alumnado para poner en marcha acciones que favorezcan la vida de las abejas y, por otro lado, para que imaginen y proyecten futuros modos de vida posibles y deseables para todos los seres vivos. De este modo, se conecta la preocupación que, previsiblemente, habrá ido aumentando en el alumnado a medida que desarrolla su trabajo con la importancia de realizar acciones colectivas para resolver los problemas socioambientales.
De la Modernidad a la Globalización
¿Qué pensarías si uno de los pueblos que vivían en América antes de la conquista, el mapuche, denunciase hoy al Estado español por la deuda histórica contraída? El alumnado que se enfrenta a esta situación de aprendizaje, titulada De la Modernidad a la Globalización, aportará distintas e incluso enfrentadas opiniones sobre la cuestión e irá descubriendo, mientras estudia las relaciones entre Europa y América del periodo comprendido entre el siglo XV y el XXI, que la respuesta no es trivial. También, que conocer el pasado es clave para entender el presente.
Aprender historia desde una perspectiva competencial requiere coger altura, y analizar amplios ciclos históricos, para comprender tendencias y los grandes cambios. Implica no seccionar la mirada política de la económica, la cultural y la interacción con el medio físico. Necesita atender a la vida de las personas de las distintas clases sociales, especialmente aquellas que son mayoritarias. Significa desarrollar estrategias de investigación, afilar la mirada holística y ensayar la capacidad de sacar conclusiones…
En el proyecto final se celebrará un juicio, al modo del Tribunal Permanente de los Pueblos, en el que el alumnado pondrá a prueba todo el conocimiento que ha ido adquiriendo sobre colonialismo y neocolonialismo, así como sobre la evolución histórica, económica y social de Chile y del pueblo mapuche.
Software libre
La conexión de nuestro alumnado con la tecnología es obviamente continua y compleja, y abordarla en clase puede ser, sin duda, controvertido y motivador. Avanzar en la indagación sobre las muy distintas formas de trabajar, estudiar y pasar ratos de ocio en el mundo digital, donde unas favorecen la libertad, la democracia o la sostenibilidad, y otras, no tanto, nos dará pie para “tirar del hilo” y hablar de privacidad y derechos digitales, de obsolescencia programada, de consumismo, basura y vertederos tecnológicos, y de la importancia de reducir, pero también de libertad y de procesos democráticos y emancipatorios.
Asimismo, en conexión con el software y para entender algunas dinámicas empresariales, se reflexionará sobre las herramientas digitales que usamos (redes sociales), cuyo fin último es la maximización de beneficios y, por tanto, su uso compulsivo y adicto, de tal manera que su diseño se pone al servicio de tal fin y no del bienestar de las personas.
El proyecto final de esta situación de aprendizaje, Software libre, nos llevará a otra acción: un estudio y un plan de transición a programas y sistemas operativos de uso libre en los dispositivos digitales de los hogares y el centro escolar del alumnado.
Con estas y otras propuestas que, de forma gratuita vamos compartiendo a través del blog Tiempo de Actuar, seguiremos intentando cuadrar el círculo y ayudando a lograrlo.