Cambios en los requisitos, personas que se vieron fuera a última hora, órdenes a los centros para que emitieran recibos a las familias… Un cúmulo de descoordinación podría ser el resumen de las primeras siete semanas de curso escolar para quienes habían solicitado una beca de comedor escolar y, hasta ayer, no sabían qué pasaría al respecto.
Según un comunicado de la FAPA Giner de los Ríos, se ha conseguido el objetivo de la reunión que mantuvieron la semana pasada con el consejero para tratar este tema. Desde la federación de AMPA se alegran de que el Ejecutivo autonómico haya optado por la propuesta que les llevaron en su momento de tomar medidas extraordinarias para una situación como en la que se encuentran miles de familias desde inicio de curso.
Según recoge el comunidado de la FAPA, el boletín oficial de la comunidad publicó un nuevo texto en el que se toma la decisión de dar la beca a todas las familias que lo hubieran pedido dentro de los plazos estipulados. Así lo recogen: «Para el curso escolar 2023/2024, todos aquellos que hubieran solicitado la beca de comedor en el plazo establecido en el artículo 12 de estas normas reguladoras percibirán el importe correspondiente a la modalidad solicitada.
Las solicitudes presentadas en plazo que debieron ser objeto de subsanación y no lo hubieran sido o no lo hubieran sido correctamente serán resueltas favorablemente mediante la resolución de concesión establecida en el artículo 16, sin que resulte de aplicación el artículo 14.3 en ningún caso».
Según explica la federación, los centros deberán ahora calcular cuáles son las cantidades que las familias adeudan por el servicio que les han prestado estas semanas atrás, antes de que les lleguen los recibos de cobro al banco. Además, los recibos que fueran ya emitidos deberán ser eliminados.
La Federación señala que los consejos escolares de los centros deberán hacer lo posible por aliviar la carga que muy probablemente caerá sobre muchas familias que solicitaron becas y ahora habrán de abonar cantidades, después de dos meses de retrasos de la Administración. La FAPA critica que en su momento los consejos giraran recibos cuando las instrucciones de la Consejería se lo impedía, e insisten en que, en la situación actual, pueden y deben permitir el prorrateo de los pagos de estos dos meses.
Según la Federación de enseñanza de CCOO, Educación ha «renunciado» a resolver los casos de las familias de manera individual y de ahí que haya tomado la determinación de conceder la beca a todas las familias, lo que, aseguran, beneficiará a 107.000 niñas y niños.
El sindicato ha emitido un comunidado co declaraciones de su secretaria general en las que asegura que «el caos ha provocado que haya familias que no han solicitado la beca porque pensaban que no cumplían los requisitos, aunque sí necesitan esta ayuda».
El mismo comunicado recoge la exigencia del sindicato para un cambio de modelo de becas. Según explican, Madrid tiene dos modalidades, en la que se cobra 1 euro por comida, lo que supone una beca del 83 % del coste. El otro, solo cubre el 45,5 % y las familias han de abonar 3 euros por menú. Creen que no es suficiente y que, en un territorio con el 14 % de su infancia en situación de pobreza, debería haber una única modalidad en la que se cubriese el 100 % del coste para las familias becadas.