El problema es global. El número de profesorado joven, por debajo de los 30 años según los datos de la OCDE, es pequeño. La población docente envejece y se acerca a la edad de jubilación y el reemplazo con profesionales más jóvenes cada vez es más complicado.
Según los datos de Panorama de la Educación 2024 publicados hace unos días, en los últimos diez años España ha mejorado levemente su situación al haber aumentado 1,2 puntos porcentuales la tasa de docentes por debajo de los 30 años. El doble del incremento en la UE y cuatro veces mayor que el de la OCDE.
Y es que en el 40 % de los países que han participado en el estudio han visto menguada la cifra de jóvenes que acceden a las aulas para enseñar en esta década. La bajada más acentuada es la vivida por Chile, con una pérdida de 7,7 puntos porcentuales. O la de Brasil con casi cuatro puntos. En la otra punta de la estadística, según el informe de la OCDE se encuentran países como Colombia, que gana casi 10 puntos; Irlanda, con un incremento de 7.4; Noruega, con 6,6 putnos, o Japón, con 5,4.
En el caso de España, las diferencias en los porcentajes de docentes jóvenes entre etapas no son muy elevadas, hay un porcentaje bajo de profesores menos de 30 años en primaria y secundaria, tanto obligatoria como postobligatoria.
La OCDE resume las causas de estas diferencias, para el común de los países estudiados, en que cuanto más elevado dentro del sistema educativo, más años de formación inicial hay que hacer y más tarde se comienza a enseñar. Pero también el hecho de que en no pocos países las personas más jóvenes abandonan la enseñanza “debido al agotamiento, a la necesidad de compaginar una gran carga de trabajo con las responsabilidades parentales, a la escasa autoeficacia en la gestión de las clases y a la sensación de aislamiento”.
Héctor Adsuar, secretario de pública de la Federación de Enseñanza de CCOO señala que en la pública el porcentaje de jóvenes es menor que en la privada, fundamentalmente por el hecho de que en la primera hay que pasar por un proceso de concurso oposición que implica tiempo de estudio, así como la necesidad de tener una cierta experiencia para ser competitivo cuando se quiere optar a una plaza.
Según los datos del Ministerio de Educación, las diferencias según CCAA son altas. También las hay entre el profesorado de la pública y el de la privada. Entre los cursos 2011-2012 y 2021-2022 la media de las y los maestros menores de 30 años descendió en cuatro puntos porcentuales, del 11 al 7 %. En este periodo hubo variaciones importantes, mientras que Canarias ganó efectivos jóvenes (del 2,8 al 7 %), Cataluña, en el otro extremo, perdió 10 puntos y se quedó en un 6 % en ese curso.
Algo parecido ocurrió con la plantilla de la privada. Canarias ganó esos cuatro puntos porcentuales, pero partía en este caso de casi un 14 % y alcanzó el 18 %. En la otra punta, sin embargo, la educación privada perdió 16 puntos porcentuales, y pasó de un 27 a un 11 %.
En el profesorado de secundaria las cosas son diferentes, puesto que tanto en la pública como en la privada, el porcentaje global de docentes menores de 30 años ha aumentado en todas o casi toda las comunidades.
Mayores de 50
El profesorado más mayor ha disminuido en educación primaria, pero ha crecido en las dos etapas de secundaria.
La escasez de profesorado es un problema que está empezando a ser importante en algunos países del mundo. Sobre todo en ciertas ramas y etapas. Las salidas laborales diferentes a la enseñanza pueden ser más atractivas por el salario, así como por el resto de condiciones de trabajo.
En cualquier caso, como señala la OCDE en su más reciente informe “un mayor porcentaje de docentes de edad más alta (con un mínimo de 50 años) implica un gran número de jubilaciones inminentes, lo que podría agravar la escasez actual de escasez de profesorado en algunos países”.
Algo más de un tercio del profesorado de primaria en la OCDE es mayor de 50 años. El 33, 6 %, un par de puntos más que hace una década. El 36,2 % lo es en secundaria obligatoria, mientras que en la postobligatoria asciende hasta el 40,7 %. Los porcentajes en España, respectivamente, son del 29,7, el 38,4 % y el 38, 2 %.
Según los datos del Ministerio de Educación, las y los maestros de primaria de más de 50 años han disminuido en la mayor parte de las comunidades tanto en la pública como en la privada en los últimos 10 años, del curso 2011 al 2021.
Los datos del Ministerio para el personal mayor de 50 años de la pública no son especialmente buenos. Más de un tercio del total están cerca de la edad de jubilación. Con cuatro puntos porcentuales menos que hace una década, pero aún así con 32,5 %.
Una de cada cuatro maestras y maestros de la privada también está por encima de esta edad, según los datos de 2021-22. Bien es cierto que la cifra ha mejorado desde el 29 % de una década atrás.
De nuevo, las diferencias autonómicas son grandes. Mientras que Cataluña ha reducido el porcentaje de maestros mayores en la pública hasta el 27 %, en Canarias ha aumentado en 20 puntos, hasta superar a uno de cada dos profesionales de primaria. Galicia (43 %) y Asturias (42,5 %) le siguen a cierta distancia.
En la enseñanza privada los datos son algo mejores. País Vasco es el territorio con peores datos (34 %), seguido por Extremadura (aunque ha pasado del 42 al 32 %) y Cataluña, que ha pasado del 26 al 32 también.
Héctor Adsuar tiene claro que es necesario rejuvenecer las plantillas y para ello pone el acento en dos posibilidades. Por una parte, “hacer atractiva la profesión docente”, lo que pasa por cuidar al personal y rebajar algunos puntos complicados de la docencia como el estrés, las jornadas laborales o la acumulación de las tareas.
Desde su punto de vista, no debería ser muy problemático el relevo, más allá de algunas especialidades muy concretas. Entre otras cosas, porque se cuentan por decenas de miles las personas que se presentan a los procesos selectivos y se quedan a las puertas.
También cree que hay que hacer una apuesta por aumentar la oferta pública para estudiar el máster de secundaria, dado el interés que suscita y la gran cantidad de personas que gastan miles de euros al año en centros privados. Muchas personas, presumiblemente, se quedan fuera de estos estudios por no poder costearse la matrícula.
En el otro extremo de la cuerda, Adsuar defiende la posibilidad de recuperar la jubilación anticipada, ya se vería si incentivada o no, que se implantó con la Logse y se mantuvo con la LOE hasta el año 2011.
El responsable sindical recuerda que aquella medida se puso en marcha para intentar rejuvenecer las plantillas docentes que tenían que poner en marcha la primera ley educativa del PSOE. Adsuar cree que ahora, con una previsible negociación del estatuto docente, siempre en el horizonte, sería buen momento para retomar esta medida.
2 comentarios
no entiendo qué problema hay en que los profesores sean mayores. De toda la vida la figura del maestro ha sido de alguien con edad y sin problema. También llega el edadismo a esta profesión? los mayores de 50 años que se peguen un tiro?
lo que importa es si es bueno o no, no la edad que tenga, y la experiencia y vocación es un plus.
Seria interesante ver también los datos en secundaria por especialidades.