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Los años de la crisis se han hecho notar, y bastante, entre los docentes. La OCDE calcula que aproximadamente, un docente español ha perdido 15 puntos porcentuales de ingresos desde 2010 hasta 2015 (año hasta el que tiene datos).
Así lo constata en su informe Panorama de la Educación, en el que desgrana en algo menos de 500 páginas, el estado de la cuestión.
La organización internacional toma 2013 como año de referencia para estudiar la variación de los salarios docentes y le concede un valor 100. Para el año 2010 este valor estaba por encima de la referencia, en torno a los 115 puntos. Para el año 2015, estaba de nuevo en 100. Explica el informe que España es de los pocos países en los que ha habido bajadas salariales entre 2010 y 2013 para, luego, que se diera una cierta recuperación. Recuérdese lo ocurrido con las pagas extraordinarias que fueron devueltas, en parte, durante el año 2015.
De nuevo la organización habla de la falta de incentivos en la carrera docente en España, al señalar que el incremento salarial entre el inicio de la carrera docente y el final no es de los más elevados. De hecho, durante los 15 primeros años de carrera y según las cifras que maneja la OCDE, ese aumento de salario es muy pequeño.
Una maestra de infantil y primaria ganará unos 6.000 dólares (4.890 €) más tras quince años de trabajo. En la media de la OCDE y de la UE22, esta cifra está por encima de los 9.500 dólares (7.885€). En el caso de los profesores de secundaria obligatoria y postobligatoria, mientras en España se mantienen con estos 6.000 dólares de diferencia entre el inicio y los 15 años siguientes, en la OCDE y la UE22 la diferencia puede llegar hasta los 12.500 dólares (10.375€).
Además de esto, la OCDE compara las horas lectivas y el total de las trabajadas por los cuerpos docentes. En este caso, los docentes españoles tienen en general más horas lectivas pero menos horas de trabajo totales. La diferencia es de unas 200 horas menos de trabajo fuera del aula. Mientras una maestra o maestro de infantil y primaria tiene 880 horas lectivas y 1.425 totales, en la OCDE en el caso de Infantil tienen 1.001 horas lectivas y 1.608 totales. En la UE22 ascienden a 1.034 horas lectivas y 1.564 totales.
Para primaria la diferencia es menor. Frente a las 880 horas lectivas, la OCDE tiene 794 y la UE22, 767. Eso sí, en las horas totales los docentes de infantil trabajan en España 1.425, frente a las 1.611 de media OCDE o las 1.557 de la UE22. Concuerda con una reivindicación clásica del colectivo: tener menos horas lectivas dentro del aula y así ganarlas para la preparación de las clases, la búsqueda de materiales o reuniones con compañeros y familias.
Gasto educativo
Un año más, la OCDE atestigua la caída del gasto educativo en España desde el inicio de la crisis en 2008. Tomando el año 2010 como referencia para todos los países y utilizando precios constantes, si en 2008 se invertía 97, en 2014, último año del que toma los datos el organismo internacional, la inversión era de 90.
Algo que también ocurre con la variación del gasto por alumno (media de primaria, secundaria obligatoria y postobligatoria). Mientras en 2008 era de 100, en 2011 había bajado a 96, y en 2014 la caída llega hasta 85. La bajada más importante se produce, pues, durante los años de mayores recortes del gasto por parte de las comunidades autónomas, obligadas por el decreto 14/2012, que aumentó las ratios de alumno profesor, además de subir las horas lectivas de los cuerpos docentes.
La OCDE constata que “muchos países” han aumentado sus inversiones desde 2008 hasta 2014, “a excepción de Estados Unidos, Estonia, Eslovenia, Hungría, Islandia, Italia y España”. Las diferencias son tan grandes en las políticas educativas como para que países como Turquía o Portugal hayan incrementado sus partidas educativas, un 76% y un 27% respectivamente, en estos mismo años.
Pero esto es lo referido a la inversión pública, puesto que el informe también recoge un aumento del 13% del gasto privado en los años de las crisis, principalmente realizado por las familias. Asegura la OCDE que en las etapas no obligatorias, estas cantidades se han dedicado a las matrículas fundamentalmente.
La bajada de las inversiones se produce al mismo tiempo que aumenta el número de alumnos. Tomando la base 100, en 2008 había 97, en 2011 ya eran 101, y en 2014, 106.
Alumnado
Mientras en España el gasto medio por alumno en primaria es de 6.970 dólares (5.785,1€), en Secundaria de 8.528 dólares (7.078,24€) y en la terciaria de 12.489 dólares (10.365,87€), en la UE22 es, respectivamente, de 8.803 (7.306,49€), 10.360 (8598,8€), 16.164 dólares (13.416,12€). Es decir, que en España se invierte más o menos un 20% menos que la media de la Unión Europea por alumnos.
A lo que habría que sumar los datos que dio a conocer el Ministerio en el mes de agosto sobre los indicadores del sistema educativo y que reflejan una caída constante del gasto por alumno desde su máximo de 2009. Con las cifras de 2014, el gasto por alumno medio es algo menor al de 2006. En relación al PIB por habitante, eso sí, retrocede hasta 2005.
Otros datos relativos a los jóvenes tienen que ver con el porcentaje de aquellos que no están estudiando ni tampoco trabajan. Mientras que el año pasado eran un 22.8%, este, según datos de la OCDE, son el 23% del total.