Después de horas de reunión entre Ministerio y comunidades autonomas, Isabel Celaá ha presentado esta tarde las líneas maestras de la Orden ministerial que se publicará en los próximos días y que pretenden dar base legal a las medidas que han de acometerse para finalizar el presente curso con la mayor normalidad posible.
Se han presentado las cuatro grandes líneas de actuación ante la prensa y mañana, tras enriquecer el texto con algunas aportaciones de la autonomías, presumiblemente se cerrará el texto. Según Celaá, el documento cuenta con el apoyo explícito dela mayor parte de las autonomías. En cualquier caso, lo que pretende el Gobierno es dar un «paraguas» para que las CCAA ejerzan sus competencias «haciendo adaptaciones curriculares y estableciendo pautas de evaluación» que puedan utilizar después los docentes en esta tercera evaluación.
A pesar de que entre las medidas que se contemplan se encuentra la realización de una evaluación continua que tenga en cuenta los aprendizajes adquiridos en las dos primeras evaluaciones y que contemple, positivamente, lo que ocurra en los próximos tres meses, tanto Isabel Celaá como Alejando Tiana, secretario de Estado de Educación, han insistido en que no se trata de un aprobado general, que este sería «injusto» y que nadie lo apoya.
El objetivo es que todo el mundo pase al curso siguiente y, si el profesorado plantea la necesidad de que alguien repita curso (España tiene uno de los porcentajes de repetición, una medida cara y que no ayuda, según diversos informes, a la mejora de los aprendizajes) habrá de justificar de manera suficiente ante la administración pública los motivos.
Evaluación continua
La ministra ha insistido a largo de su comparecencia en la necesidad de que la evaluación sea continua, y ha intentado transmitir la confianza tanto del Ministerio como de las comunidades autónomas en la profesionalidad del personal docente que es quien «conoce al alumnado». «Que se sientan con confianza para decidir lo mejor para cada estudiante».
Esta evalulación continua tendrá en cuenta lo ocurrido hasta el comienzo del estado de alarma en las aulas, así como lo que se ha estado haciendo, y se seguirá haciendo, en las próximas semanas y meses. Pero haciendo hincapié en las competencias básicas adquiridas y dejando constancia en un informe individual de las posibles carencias que pueda tener cada chica y cada chico para que el docente del siguiente curso o nivel tenga toda la información posible para retomar la labor. «Lo esencial, ha dicho la ministra, es lo que dice la norma para criterios evaluación».
A pesar de que tanto la ministra como Alejandro Tiana, secretario de Estado de Educación han insistido en que las medidas no son un aprobado general, también han asegurado que los resultados de la evaluación del tercer trimestre «no será negativo para nadie por las condiciones en las que tenemos a la ciudadanía». La ministra ha asegurado que se tienen que tene en cuenta las condiciones en las que se encuentran los hogarres, convertidos en aulas virtuales, centros de salud, con espacios reducidos y con niñas, niños y jóvenes de diferentes edades. «El sistema tiene que adaptarse a las circunstancias. Y tenemos ambicón de progresar».
A esto se añade la puesta en marcha de programas de refuerzo, similares a los antiguos PROA, que tendrán que plantearse para el comienzo del próximo curso con la idea de que se adquieran los conocimientos y competencias que hayan quedado del este curso.
Para el mes de julio se prevé que se realicen actividades de ocio, también de recuperación académica, como las que vienen organizando ya las comunidades autónomas, los ayuntamientos y otras organizaciones del ámbito social, como ONG. En palabras de la ministra, desde su Departamento, se dará todo el apoyo posible para que se desarrollen dichas actividades. El objetivo es que lleguen a las personas más vulnerables.
Estas actividades, así como la eventual vuelta a las aulas en el mes de mayo o junio, como todas las decisiones, tendrá que tomarla en su momento el Ministerio de Sanidad. En un sentido parecido, la ministra ha asegurado que la EVAU, retrasada a finales de junio y primeros de julio en todas las comunidades autónomas, sigue en pie y, de momento, no se ha planteado la posibilidad de un plan B, es decir, de realizarla de manera telemática o retrasarla aún más.