Sinopsis
La educación, como parte activa de la sociedad, está sufriendo el modelo económico y social capitalista, donde toma fuerza el individualismo y la competitividad, fundamentado en la ideología neoliberal. Suele racionalizarse y presentarse como “libertad de” y se envuelve en el lenguaje del individualismo y la competitividad.
Se potencia la iniciativa privada y el mercado. Este modelo reemplaza el concepto de “bien común” por el de “responsabilidad personal”; el de derecho social por el de inversión individual y así nos convierte en consumidores y clientes.
Ahora, más que nunca, es necesario articular un amplio espacio de confluencia en defensa del bien común que desnaturalice el orden neoliberal, es necesario apostar por un modelo educativo público que garantice el bien común de todas las personas, no el de unas pocas, es necesario apoyar la educación con un objetivo democrático, inclusivo y equitativo que desarrolle el gusto por el saber y la formación de ciudadanía crítica y comprometida con la mejora de la sociedad en la que viven.
Es necesario el cambio de modelo educativo en beneficio de un modelo social, público, inclusivo y laico, que ponga el conocimiento al servicio y al alcance de toda la sociedad. Por justicia social debemos exigir una educación para todos y todas.
Enrique Javier Díez Gutiérrez (León, 1962) es ensayista y profesor titular de la Facultad de Educación en la Universidad de León. Doctor en Ciencias de la Educación. Licenciado en Filosofía. Diplomado en Trabajo Social y Educación Social. Especialista en organización educativa, actualmente desarrolla su labor docente e investigadora en el campo de la Educación Intercultural, el género y la política educativa. Este autor, nos dice Jaume Carbonell, combina la actividad académica como profesor titular en la Facultad de Educación de la Universidad de León con el activismo social muy intenso. Participa en el Foro por la memoria histórica de León, en el grupo de hombres por la igualdad, en el Foro de Sevilla por otra política educativa y fue coordinador del Área Federal de Educación de Izquierda Unida.
Reseña
La educación no puede ser neutra, hay que posicionarse en busca del bien común, de la democracia, de la inclusión, de la justicia social y de la solidaridad colectiva. El profesorado debe tener claro que luchar por los Derechos Humanos no es “meterse en política» y que esto nos lleva a ponernos en frente, en ocasiones, del poder dirigente, en caso de no respetarse estos derechos que tienen las personas por el solo hecho de vivir en una comunidad.
Imbuídos en la vorágine del día a día, con tanta burocracia, tantos exámenes, la ratio tan alta, tantas presiones de la administración, tanto problema en cuanto a la implantación de las leyes… se nos olvida pensar y reflexionar sobre las finalidades de la educación y esto hace que nos dejemos llevar por el ambiente general de mercantilización, de injusticia social y de falta de democracia en la que están presos colegios, familias y alumnado.
Comenta Díez que nos están desviando del sentido y la finalidad de una educación pública, laica e inclusiva que durante tanto tiempo ha sido uno de los emblemas de la comunidad educativa. Están reconvirtiendo radicalmente el propósito de lo que es una educación pública, equitativa, coeducativa, ecológica, integral, intercultural, inclusiva y democrática al servicio del bien común.
La educación está girando hacia las reglas del mercado, se potencia la privada, se disminuye la escuela pública y se marcan pautas de beneficios de empresas potentes que solo van a sacar rentabilidad de “este negocio de la educación”; se da así un giro radical a lo que son las finalidades educativas en una sociedad democrática, en la que se dejan de considerar los derechos básicos para el desarrollo vital de toda la población y la cohesión de la sociedad.
Nos comenta Díez que se pasa a considerar esta industria de la educación como un medio para potenciar la competitividad del sector industrial de un territorio y una oportunidad de éxito individual para quienes sean capaces de aprovecharla con el fin de triunfar en una sociedad de mercado competitiva y darwinista.
Poco a poco nos vamos metiendo de lleno en la “pedagogía del egoísmo”, según el autor se va abandonando la idea de que la educación debe estar fundamentalmente dirigida hacia el desarrollo integral de las personas y de una ciudadanía crítica, capaz de intervenir activamente en su entorno y procurar transformarlo.
La escuela pública está sufriendo toda esta teoría de mercado y está mermando su prestigio y sus ideales, sufriendo una segregación de las personas.. Si resulta que a la privada concertada se le aumentan las clases en detrimento de la pública, está mandando un claro mensaje a la población. Así, en algunas zonas, las escuelas públicas están habitadas con familias faltas de recursos, migrantes, minorías desfavorecidas…
El libro “La educación en venta” está dividido en tres partes: En la primera parte se habla del camino que hay desde el derecho social a la inversión individual. En la segunda parte se habla de la educación en venta, cómo nos venden la educación, el patrocinio empresarial y el negocio que hay montado en torno a la educación. En la tercera se habla de la Universidad, los negocios montados en torno a ella y la investigación.
En definitiva, nos concluye Díez, Dos proyectos ideológicos, sociales y políticos avanzan en España y en todo el mundo. Estos dos proyectos conllevan dos formas distintas de entender a las personas y la educación. El primero está basado en el capitalismo, en el egoísmo competitivo y está fundamentado en la ideología neoliberal. El segundo arraiga en el bien común, la solidaridad, los derechos humanos y la ecología crítica.
Está claro que el profesorado sí debe posicionarse y más si trabaja en la escuela pública. Debemos apostar por un modelo educativo que garantice el bien común, que sea democrático, que garantice la inclusividad y sensible con los aspectos sociales y la equidad.
Decía Freire que la educación debe convertirse en “un ejercicio de libertad”, el medio a través del cual hombres y mujeres se relacionan crítica y creativamente con la realidad y descubren cómo participar en la transformación del mundo.
Libro muy recomendable para docentes, educadores y sectores sociales que crean que esta sociedad puede cambiarse y que la educación es clave para esa transformación. Pienso que es clave para que los docentes se percaten de la mercantilización en la que nos estamos metiendo, sobre todo con las tecnologías educativas.
Para saber más
• La educación en venta con Luis Torrego y Enrique Díez. Entrevista de Editorial Octaedro, Pablo Castillo. La educación en tiempos de confinamiento: por una educación pública e inclusiva para el bien común.
• Reseña de Dolores Álvarez en INED21 del libro:Pedagogía antifascista (Construir una pedagogía inclusiva, democrática y del bien común frente al auge del fascismo y la xenofobia. Enrique Javier Díez Gutiérrez