La docencia y el audiovisual son los ejes profesionales de Ivan Albacete, profesor de inglés y francés en secundaria, y creador de cortos de animación, por los que ha recibido premios nacionales e internacionales. Es cofundador y codirector del ‘Sex Education Film Festival’, junto con Nadia Gumà, con quien inició este proyecto para difundir la importancia de la sexualidad para aprender a conocerse y aceptarse.
El Sex Education Film Festival empezó hace tres años para dignificar la información sobre educación sexual. ¿Qué aporta este evento?
Hay muchas fuentes de información, pero, a veces, no sabes muy bien dónde ir cuando tienes una duda. El festival pretende ser un espacio de debate y la fuente básica es el audiovisual. El hecho de ver a alguien en pantalla con tus mismas experiencias hace que te sientas incluido en la sociedad. Intentamos poner cortometrajes muy diversos que hagan sentirse incluidos, y creemos que el cortometraje lo hace de forma entretenida para los alumnos y el público en general.
Esta semana tiene lugar su tercera edición. ¿Qué se encontrará el público?
El festival tiene lugar de lunes a sábado, y tenemos dos categorías diferenciadas: teens y adultos. El Teens Education está enfocado al público juvenil, tiene lugar de lunes a viernes por la mañana, y ya tenemos a 2.600 alumnos inscritos de 15 institutos. Vienen acompañados de sus profesores y los tenemos distribuidos en estos cinco días. Las sesiones para adultos se celebran el jueves y el viernes por la tarde y por la noche, y el sábado tendrá lugar la entrega de premios y la clausura. Además, el festival se puede ver online.
¿De dónde son estos institutos?
Son del Vallès Occidental, sobre todo de Terrassa.
¿Quiere hacer de Terrassa un centro de referencia en materia de educación sexual desde el audiovisual?
El festival está financiado en gran parte por el Ayuntamiento de Terrassa. Es una ciudad que tiene un amplio abanico cultural y es un centro neurálgico y de fácil acceso para toda la comarca. Hemos seleccionado 40 proyecciones que se podrán ver en el Cine Catalunya, que tiene unas 390 localidades y que llenamos toda la semana con estos 2.600 alumnos.
Según tu experiencia, ¿qué temáticas generan mayor debate?
Los temas que más se tratan son la homosexualidad, la transexualidad, todo lo que tenga que ver con lgtbiq+. También conocerse a sí mismo, el género, las primeras parejas, las primeras relaciones sexuales, las parejas tóxicas, el feminismo. Con los centros educativos, el pasado año se habló mucho de intersexualidad y de enfermedades de transmisión sexual. Al final de la sesión, hicimos un kahoot, que es como cuestionario interactivo, ya los alumnos les motivó mucho, con más de 200 personas contestando a la vez.
¿Cuál es el perfil de los asistentes?
Invitamos a toda secundaria, de 12 a 16 años, ya bachillerato, hasta los 18 años. En algún caso, hemos tenido algún curso de sexto de primaria porque nos lo han pedido y seleccionado la programación. Público adulto, tenemos de todas las edades, han llegado a venir familias enteras, no hay nada explícito en los cortometrajes. Y quizás sí que vienen más mujeres.
Más de la mitad de las 40 proyecciones están dirigidas por mujeres y gran parte de las temáticas son feministas. ¿Generalizando, y con excepciones, hay relación entre la educación sexual y el talento femenino?
Como opinión personal, creo que sí existe esa tendencia. En este sentido, la mujer siempre ha tenido un valor añadido, parece estar más concienciada. Aunque suena a tópico, la comunidad lgtbiqa+, se ha sentido con más apoyo por parte de la mujer, ha sentido el cambio y la inclusión por esta parte que defiende la igualdad y el feminismo.
Pensando en el festival se tocan muchos temas. En alguna ocasión, la comunidad trans nos ha dicho que faltaban referentes mujeres en los cortos. Nuestra labor es abrirnos a directores y directoras que nos abran otras realidades y nuevos mercados.
Si hay mucha información, sobre todo en la era Internet, pero no existe una buena educación sexual. ¿Qué está fallando y qué debería hacerse mejor?
Habría que definir más las fuentes, ya veces hay tanta información que es difícil saber dónde encontrar buena. Y hay temas que todavía siguen siendo tabú y que no llegan a todo el mundo.
¿A qué temas te refieres?
Por ejemplo, el VIH. Aunque hay avances, a veces todavía sigue estigmatizándose las personas que tienen VIH.
¿Qué papel juegan las familias en cuanto a educación sexual?
Tienen un papel crucial. Un niño comienza a preguntarse cosas, más o menos, a los 8, 9 o 10 años, y la familia debería ser la principal precursora del acompañamiento de esos niños que llegan a la adolescencia.
¿Y qué papel deberían tener los centros educativos?
Escuela y familia deberían ir de la mano en educación sexual, como una coeducación, y mirar hasta dónde llegas tú y qué explico yo. A veces puede ser difícil, depende también de los ideales de cada familia.