El objetivo inicial, firmado por toda la oposición en pleno, era el de derogar la Lomce en cuanto la mayoría parlamentaria así lo permitiese. La mayoría parlamentaria consiguió sacar adelante una moción de censura que llevó al Ejecutivo de Mariano Rajoy a la oposición. Pero la derogación de la ley Wert no se ha puesto sobre la mesa. Los plazos de la legislatura y la dificultad en la negociación han dejado la redacción de una nueva ley educativa en el cajón de los proyectos futuros.
Eso sí, el Ministerio ya planteó que haría las modificaciones necesarias para revertir algunos de los efectos más perniciosos de la Lomce en el sistema educativo. Antes de Navidad quiere tener listo dicho texto. Y es eso lo que ahora mismo se está discutiendo, y para lo que se pide la participación de quienes estén interesados.
Qué hay que modificar
El Ministerio de Educación y Formación Profesional, en la justificación de la necesidad de este cambio legislativo, enumera los asuntos que quieren modificar por ser especialmente gravosos. Además, aseguran desde el Departamento, se hará hincapié en aquellos temas en los que ya hay consenso (tras escuchar las diferentes intervenciones que se dieron en la Comisión del Pacto organizada por Íñigo Méndez de Vigo, exministro de Educación) y tendrán muy presentes los objetivos y metas marcadas desde la OCDE y la UE.
Entre aquellas cosas que se pretenden se encuentra la mejora de la equidad del sistema educativo para que toda la población pueda gozar del derecho a la educación. Así mismo, se hará una modificación de la estructura del currículo para adecuarla a la inclusción y al desarrollo de las competencias básicas. En relaciónal currículo, se pretende que la materia de Religión deje de tener peso en la nota del alumnado y no obligue a la matriculación en una asignatura espejo a quienes no quieran cursarla.
La evaluación dejará de tener un sentido que sea el de jerarquizar a los centros. Será una evaluación centrara en el diagnóstico de la situación y para el planteamiento de las mejoras necesarias.
También se quiere equilibrar la balanza dentro de colegios e institutos haciendo que los consejos escolares vuelvan a tener el peso que perdieron, de manera que las direcciones escolares dejarán de tener la capacidad de maniobra ganada con la Lomce.
El Ministerio pretende, así mismo, mejorar la transparencia en la rendición de cuentas que han de hacer todos los centros en virtud de su autonomía escolar; se mejorará la admisción de alumnos mediante la eliminación de los elementos discriminatorios derivados de la especialización de los centros.
Por último, el futuro texto legal pretende recuperar la capacidad de las administración para la programación de las enseñanzas y para que se apoye la coeducación y, además, se pretende regular las competencias del Estado y las comunidades autónomas para fomentar la lealtad y la colaboración entre administraciones.
El plazo para enviar opiniones sobre esta reforma termina el 10 de noviembre. Quienes estén interesados pueden escribir a la dirección de correo electrónico: consulta.seefp@mecd.es