SI hace unos días hablábamos de que los centros educativos eran el tercer foco de contagios más importante según los ámbitos que recogen las estadísticas del Mninisterio de Sanidad cada viernes, los datos de la última semana «mejoran» esa situación. Pero lo hacen por el empeoramiento en otros ámbitos, como el familiar.
A las puertas de las fiestas de Navidad y con la espada de damocles de algunas comunidades que solo han previsto la contratación de personal de apoyo para la pandemia hasta finales de diciembre, no hay una mejoría sustancial en las cifras tanto de brotes nuevos como de contagios asociados que se producen en centros educativos de todo el país. Además, no existen datos sobre en qué etapas hay más incidencia o cuáles son los territorios con más casos.
Otro de los problemas es que hasta mediados del mes de octubre no se recogían datos por ámbitos, de manera que la evolución desde las primeras aperturas en julio o la vuelta al cole, a mediados de septiembre, no quedan recogidas. Eso sí, a pesar del cierre de colegios desde marzo y hasta prácticamente hace dos meses, el número de brotes y casos acumulados en centros educativas es relativamente alto: 1.551 brotes desde marzo con un total de 9.375 casos de contagio. En cualquier caso, son unas de las cifras menores comparadas con el resto de ámbitos.
Como se aprecia en la gráfica, el número de brotes en los centros educativos, ya desde la tercera semana de octubre, se ha estabilizado entorno a los 190-200 contabilizados cada semana. De igual manera, el número de casos de contagio en esos brotes también se mueve en una horquilla entre los 1.280 y los 1.150.