El 26 % de los hogares con menores declara tener muchas dificultades para llegar a final de mes. Más de la mitad de las familias con menores declara tener cierta dificulta. Son más de 100.000 los hogares en los que ha empeorado su situación famliar.
Según Educo, uno de los mayores problemas que enfrentan las familias en la vuelta al cole es el gasto del comedor. Un gasto que se suma al que supone la vivienda, un 32 % de media, y otro 16 % compuesto por la alimentación, según los datos de la Encuesta de Presupuestos Familiares del INE de 2024.
La ONG reclama una mejora en el diseño y cobertura de las becas y ayudas, así como el crecimiento en el número de personas beneficiarias y la reducción de las barreras burocráticas para acceder.
La situación en los colegios públicos de infantil y primaria es, dependiendo del territorio, muy diferente. Mientras que hay comunidades como Madrid o País Vasco que se encuentran prácticamente en el 100 % de cobertura de comedores en centros, otras como Castilla-La Mancha o Murcia están entre un 60 y un 62 %. Peores son las cifras para Ceuta (47 %) y Melilla (23 %).
Las cosas se ponen peor si se atiende a los centros de secundaria, en los que la tónica general es que no exista comedor y donde el porcentaje de comensales es realmente mínimo. La media de institutos con comedor es del 16,7 %, de manera que solo el 3 % del alumnado acude al servicio.
Que la infancia es la que más está sufriendo, desde hace años, las situaciones de pobreza y exclusión social es bien sabido. En relación a su acceso a la alimentación, no hay excepciones. Según los datos del INE, en 2004 el 1,9 % de niñas, niños y adolescentes (NNA) estaba en situación de carencia material. Hoy son el 6.9 %. Según los datos que maneja Educo, la situación es un poco peor si se mira a NNA de 6 a 11 años (7,1 %) y para jóvenes de 12 a 15 (7,2 %), estos últimos, precisamente, en edad de ir al instituto.
Una situación que se agrava en algunos territorios en los que, a pesar de altas tasas de existencia de comedores, el porcentaje de niñas y niños que los utilizan son bajos, como puede verse en el siguiente gráfico.
El 13 % del alumnado recibe, en primaria, algún tipo de ayuda para el comedor escolar. Según un informe de Educo, elaborado en 2022, hasta un 63 % de quienes necesitan y solicitan la beca, no la reciben. El nivel de cobertura de este tipo de ayudas es, en todos los casos, muy bajo, según los cálculos realizados por la ONG. Las diferencias territoriales son enormes.
Según el estudio de 2022 El comedor escolar en España. La visión de las familias, elaborado por la misma organización, aunque solo se benefician un 13 % de las becas y solo van al comedor el 47 % de los estudiantes de primaria, si el servicio fuera gratuito, acudirían el 77,4 %.
Para Macarena Céspedes, responsable del informe, la principal barrera para que esto ocurra «es la económica, el coste de acceder al comedor escolar». Desde su punto de vista, este coste, así como el porcentaje de personas que se encuentran en riesgo de pobreza o exclusión, así como la inversión de las administraciones autonómicas en becas y ayudas, son los elementos que marcan la situación.
Pilar Orenes, directora general de Educo, «depende de donde nazcas, te tocará o no» una beca para comedor. La diferencia en los criterios de acceso a las ayudas, la inversión en ellas y el hecho de que no se piensen como un derecho subjetivo, al menos para las familias con menor renta, hace que muchas personas que podrían recibirlas no las obtengan una vez que se acaba el presupuesto asignado.
Hace años que Educo reclama que el servicio de comedor sea gratuito y universal. Por eso reclama que se incluya en los Presupuestos Generales del Estado una nueva transferencia de 468 millones de euros a las comunidades autónomas para que estas, mediante cofinanciación, garanticen el acceso al comedor escolar gratuito, al menos, para las NNA que se encuentren por debajo del umbral de la pobreza y que se acuerde que este umbral sea la renta mínima en todo el Estado para acceder al servicio.
También reclaman un reparto más equilibrado para que quienes más lo necesitan se beneficien de las becas y ayudas al comedor. Por eso reclaman que tengan acceso el 100 % de NNA en riesgo de pobreza y exclusión. También que sean otorgadas con sistemas simples, transparentes y fácilmente comprensibles, o que tengan en cuenta la diversidad familiar.
Educo también reclama que los centros de secundaria ofrezcan servicios de comedor o alternativas similares que garanticen una comida adecuada al día, al menos, para su alumnado y, paralelamente, que se aumente la ayuda por menor al cargo, a las familias de rentas más bajas, hasta los 2.600 euros anuales.
En este sentido, la ONG pone sobre la mesa que solo el 16 % de los IES tienen comedor y solo el 3 % del alumnado los utiliza. En unas edades en las que prevenir problemas de salud alimentaria podría hacerse desde este espacio. Dada la dificultad que entraña, en cuanto a inversión e incluso falta de espacios suficientes para tener comedor en todos ellos, desde Educo hablan de la necesidad de estudiar otras posibilidades.
Pero incluso antes de eso, marca Orenes, es importante «generar el convencimiento de que es clave. Cuando. esta mirada ese produzca también en secundaria, las soluciones se encontrarán».
Céspedes termina dando una parte del secreto: «Cuando hablamos de NNA que no comen proteínas cada dos días, quienes más lo sufren son los de 12 a 16 años. No tiene sentido que dejes de garantizar esa comida».