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Sinopsis
Con frecuencia se olvida y no se llega a tomar conciencia de cómo la sociedad influye en la formación de nuestra infancia y adolescencia, en algunos casos con más fuerza que la escuela. En La sociedad que (des)educa (Parábolas para los tiempos que corren), Antonio Lara vincula la realidad social y la realidad educativa como dos ejes ineludibles en la educación de las jóvenes generaciones. Analiza la labor de la escuela y pone de manifiesto el apoyo necesario que debe darle la sociedad. Apoyado en su larga experiencia en distintos ámbitos educativos, escribe con conocimiento de la realidad y como agente reflexivo del mal que siente el docente en una sociedad en la que no es del todo apreciado. La educación siempre es la esperanza, pero su labor es fácilmente destruida fuera de sus aulas. Son muchos los enemigos externos y pocas las posibilidades dadas para acompañarla en la transformación educativa, ética y moral de la sociedad. Es fácil que su prestigio se diluya en un mundo líquido, en el que encuentra un sinfín de obstáculos.
Antonio Lara Ramos nació en Noalejo (Jaén) en 1957. Es escritor, historiador y ensayista. Licenciado en Ciencias de la Educación y doctor en Historia Contemporánea. Ha sido Delegado Provincial de Educación en Granada y Presidente del Consejo Escolar de Andalucía. Asiduo colaborador con las páginas de Opinión del diario Ideal. Es autor de varias novelas y ensayos. En su carrera profesional ha ejercido de maestro de Infantil y Primaria, profesor de Secundaria, asesor de formación del profesorado e Inspector de educación. Ha publicado varias obras de temática histórica, diversos ensayos sobre temas educativos y las biografías Pedro Antonio de Alarcón (2001) y Matilde Cantos: un compromiso social (2009).
Es autor de las novelas La renta del dolor (2013), una semblanza entre el exilio y el retorno de los exiliados en los últimos años del franquismo; La noche que no tenía final (2015), una historia de solidaridades alrededor de la trata de blancas; y Cae la ira (2018), una aproximación a la cruda realidad social de la posguerra española y a los dramas que siguieron a la guerra civil en un entorno rural. Askatu (2021), su cuarta novela, nos retrotrae, desde la experiencia de un joven foráneo a Euskadi, a los años finales de la actividad terrorista de ETA, con el asesinato de Isaías Carrasco como telón de fondo. Su blog http://antoniolararamos.blogspot.com/
Reseña
El autor aprovecha su larga experiencia en los diferentes ámbitos de la educación para ofrecernos una panorámica amplia del sistema educativo y nos lleva a la reflexión con la finalidad de la mejora de la educación.
Como nos dice en el prólogo Juan de Dios Villanueva, no nos ofrece un punto de vista, más bien nos brinda un abanico de perspectivas que nos hace sumergirnos en una catarsis educativa desde las aguas del escepticismo: unas veces desde la realidad pura y dura; otras, desde la imaginación, la ilusión, las rutinas, las diversas secuencias que se dan en el aula, en la escuela, en los patios, en las familias, en la calle…
Antonio Lara nos hace reflexionar a través de siete parábolas que reflejan una realidad, sobre la escuela, el sistema, las instituciones, la sociedad, las familias, las leyes… todo esto apoyado en su larga experiencia en este mundo educativo, siempre pensando en mejorar la educación y transformar la realidad social en la que vivimos.
Entra de lleno en el debate de la formación inicial de los docentes y nos pone de manifiesto la deficitaria formación que se da a los estudiantes, tanto es así que hasta que no entran en las aulas no empiezan a darse cuenta de los que es verdaderamente la escuela. ¿Habría que realizar más prácticas en los centros educativos y menos instrucción?.
Lara cita a Marina Garcés, filósofa, activista y docente, y se hace eco de sus palabras “ El debate equivocado es contraponer tradición e innovación como antagonismos irreconciliables, sin darle la oportunidad a lo ya trabajado de demostrar que también puede servir de plataforma donde aposentar futuros cambios”. “Si la escuela no ha avanzado como debiera, a pesar del ciclón legislativo que ha sufrido durante la democracia y la dotación de recursos que ha llegado a ella, tampoco la ha acompañado la visión de la sociedad y su relación con ella. Siempre que hay algún hecho noticiable, o algún reconocimiento que despierta ruido alrededor de la escuela… Ecos desmesurados, más atentos a la repercusión y al ruido que a la conciencia del daño infligido. Gritos, críticas, ruido, refriegas políticas, y todo para nada, solo para ensuciar los patios de recreo de las escuelas”.
Página a páginas sus reflexiones nos llevan por los capítulos que nos van a ayudar a entender mejor qué debemos hacer para que la educación esté bien valorada, para que la sociedad se implique en la escuela, para que las familias entiendan que escuela y sociedad necesitan entenderse, para que los docentes entiendan que la escuela debe salir de sus muros y aprender del mundo que la rodea… Así nos encontramos con:
- La educación en un mundo líquido
- ¿Qué espera la escuela de la sociedad?
- La educación, ¿salvadora del mundo?
- La escuela frente a todos
- La infancia cibernauta
- El mundo infinito de un pozo sin fondo
- La escuela: contrapeso en la búsqueda de los equilibrios
Este libro es muy recomendable para el profesorado y agentes sociales preocupados por la educación. Su lectura es amena y llena de tanta experiencia que no cabe la menor duda que lo que estamos leyendo tiene peso específico en las reflexiones del mundo educativo. Es bueno que veamos su proyección y sus pensamientos al haber pasado por los distintos sectores de la Administración y también por las aulas.
Para saber más
- La educación a debate en Ateneo de Granada
El escritor Antonio Lara Ramos, en TG7, nos presenta su novela Askatu. Portal número 6, un relato sobre el terrorismo de ETA.